Científicos descubren célula que ataca tejidos cancerígenos

Investigadores franceses identificaron en ratones un nuevo tipo de célula inmunitaria que ataca los tejidos cancerígenos, lo que constituiría una nueva arma para luchar contra la enfermedad, informaron hoy fuentes médicas a la prensa local.

CelulasLas investigaciones, realizadas por la Universidad París-Sur, el Instituto Gustave Roussy y el Inserm bajo la dirección del profesor Lawrence Zitvogel, fueron realizadas en ratones y aún no se prueba su efectividad en seres humanos.

Las células descubiertas por los investigadores framceses son mucho más pequeñas que las células cancerígenas (entre cinco a 10 veces más grandes) pero con capacidad de destruir a estas últimas por el simple contacto.


El equipo de científicos trabaja sobre la hipótesis de que esta misma capacidad de las células probada en los ratones se manifieste también en los humanos abriendo así una nueva vía para generar armas en la lucha contra el cáncer.

Las investigaciones, que serán publicadas en febrero en la prestigiosa revista especializada «Nature Medicine«, iniciaron hace varios años después de que varios científicos se interesaron en las células dendríticas del sistema inmunitario.

Dichas células, encargadas en gran medida de la protección del organismo contra agresores diversos e identificadas en las ratas, el hígado o los ganglios, tienen como misión enseñar a los linfocitos T a defender el organismo contra los virus, bacterias y otros.

Estas células dendríticas capturan a los antígenos en la piel o en las mucosas, migran hasta la linfa y ahí encuentran a los linfocitos T, listos para ser «educados».

Estos se introducen inmediatamente en la circulación sanguínea. Ante la menor alerta, atraviesan la pared y se dirigen hacia el tejido agredido, matando a las células infecciosas o tumorales.

Sin embargo, las células descubiertas por los investigadores son un sub-tipo de las dendríticas bautizadas como IKDC (Interferon producing killer dendritic cell) de un tamaño de entre 5 y 6 micras.

Su novedad reside en que son capaces de acabar directamente con las células tumorales, sin pasar por la etapa intermediaria de linfocito T.

Indicó que «en el caso de los ratones con melanomas de colón, las IKDC son capaces de migrar hacia la zona infectada, infiltrarse en ella masivamente y destruirla muy rápido, en unas cuatro horas, después de un espectacular baile alrededor de células cancerígenas».

La hipótesis de que las IKDC existan también en los hombres constituye una gran esperanza para la cancerología. El reto es ahora identificarlas, ya que estas pequeñas células son escasas.

Además, los investigadores confían en que la actividad antitumoral de las células se amplifique con la combinación de los medicamentos específicos antitumorales Glivec e Interleukine 2.

Indicó que en los próximos meses se realizará un ensayo clínico con pacientes que presentan cáncer de ovario y que no toleran la quimioterapia y con enfermos de sarcoma gastrointestinal que rechazan el Glivec.

De acuerdo a los investigadores, el objetivo es encontrar células IKDC en el seno del tumor.

Fuente: Milenio