Logran transformar el CO2 en gas natural

author | mayo 6, 2008

Gas_NaturalUn equipo de investigadores británicos, dirigido por la española Mercedes Maroto-Valer, ha desarrollado una tecnología capaz de transformar el dióxido de carbono (CO2), el principal responsable del cambio climático, en gas natural.

La investigación se ha realizado en el Centro para la Innovación en Captura y Almacenamiento de Carbono (CICCS) en el Reino Unido, un laboratorio pionero en la búsqueda de soluciones que permitan captar y procesar el CO2 para reducir la presencia de este gas de efecto invernadero en la atmósfera.

De las diversas soluciones que estan desarrollando, esta nueva tecnología capaz de convertir el dióxido de carbono en gas metano, el principal componente del gas natural, gracias a un proceso similar a la fotosíntesis de las plantas, es la más prometedora.

«Las plantas cogen CO2, agua y luz y lo transforman en azúcares. Nosotros hacemos un proceso parecido. También cogemos luz, agua y CO2, pero en vez de generar carbohidratos producimos metano«, explicó esta investigadora. «Sería la solución perfecta», concluyó.

Esperemos que esta novedosa tecnología evolucione favorablemente y pronto podamos combatir la presencia dióxido de carbono con su aprovechamiento, y no con su enterramiento bajo tierra como también se está investigando.

Fuente: EFE

Calefacción para carreteras

NeumaticoLa Agencia de Carreteras del gobierno británico planea reciclar la energía solar recogida en verano por las carreteras del país y utilizarla en invierno para eliminar el hielo de su superficie. . Para lograrlo, se instalarán bajo las carreteras unas tuberías que recojan esta energía solar.

La intención es evitar que se congelen las carreteras del país y de momento se realizará una prueba piloto, que en caso de éxito, se ampliaría a más carreteras.

Esta misma tecnología se está probando también para calentar y refrescar edificios, reducir las facturas de la luz y disminuir las emisiones de gases invernadero.

Este proyecto ha sido bautizado como Interseasonal Heat Transfer (IHT), y pretende instalar una red de tuberías plásticas rellenas de agua justo debajo de la superficie de la carretera. En verano, cuando la temperatura de las carreteras puede alcanzar los 40ºC, el agua se calienta y es bombeada a tuberías aisladas con poliestireno; en invierno, cuando los sensores detectan la temperatura de 2ºC, el agua caliente se bombea de nuevo hacia la carretera para calentar el suelo y evitar la formación de hielo.

Según los ingenieros, el sistema tiene un potencial brillante. «Puede generar la mitad de energía que un panel solar colocado en un tejado y cuesta unas 12 veces menos», añadieron.

Fuente: The Guardian Environment

La dieta no altera el número de células grasas

ObesidadUn estudio realizado recientemente en el Instituto Karolinska y publicado en la revista Nature, asegura que si la disposición genética hace a una persona tener más células grasas, ninguna dieta que haga logrará reducir su masa corporal.

El hallazgo asegura que ciertas personas constantemente producen nuevas células grasas, o adipocitos, para reemplazar las que mueren. Obviamente, la gente con sobrepeso es la que más genera y reemplaza estas células y por lo tanto, su grasa corporal seguirá igual a pesar de las dietas que hagan.

La investigación estudió a 687 pacientes, tanto obesos como delgados, que perdieron grandes cantidades de peso. Se registró el número y el tamaño de sus adipocitos, así como su edad, sexo, e índice de masa corporal. Hasta la fecha, se creía que los adultos no pueden producir nuevos adipocitos, las células que se acumulan en el estómago y cintura a medida que engordamos, y este aumento de grasa corporal se producía al incorporar más lípidos en los adipocitos ya existentes y de esta forma se establecía el peso (delgado, con sobrepeso u obeso) pero el nuevo estudio asegura que el adulto humano constantemente produce nuevos adipocitos, independientemente de su peso, sexo o edad.

Esta noticia puede entristecer a algunos, pero hay que mirarlo desde otro punto de vista, conocer bien como el ser humano regula su grasa corporal puede ayudar a diseñar estrategias que realmente funcionen y no partiendo de una idea errónea como se creía hasta este estudio.

Fuente: BBC Ciencia