La superficie terrestre se hunde 7 centimetros por el peso del amazonas

Un estudio ha encontrado que, con las crecidas anuales del río Amazonas, una porción de Sudamérica se hunde varios centímetros por el peso extra, y se eleva después al retirarse el agua.

AmazonasEsta fluctuación anual de nivel en la corteza terrestre es la más grande registrada, y algún día puede ayudar a los científicos a cuantificar la cantidad total de agua en la Tierra. (clicar en la imagen para agrandar)

Tener una estimación de las existencias planetarias de agua dulce, desde aguas subterráneas a ríos, pasando por humedales y glaciares, entre otras fuentes, mejoraría mucho la capacidad de predecir sequías, inundaciones y cambios climáticos.

El estudio empezó en 2004 después de que Michael Bevis, ahora profesor de ingeniería y geodesia en la Universidad Estatal de Ohio (OSU), observó movimiento vertical en una estación GPS que había colocado en las cercanías de un lago en los Andes. Concluyó que cuando el nivel de agua en el lago crecía y disminuía, el suelo circundante se movía en respuesta a ello.


Bevis empezó a buscar oscilaciones similares en los datos recopilados de otras estaciones GPS en Sudamérica. Otros científicos ya habían comunicado la detección de cambios similares hasta de 1 centímetro en otras partes del globo, pero sospechaban que el mayor movimiento ocurriría en la cuenca del Amazonas, el mayor sistema fluvial del mundo. A finales del 2004, un grupo empleó datos de satélite para predecir que el lecho de roca firme bajo el Amazonas se elevaría y hundiría cerca de dos centímetros cada año.

Pero cuando Bevis analizó los datos de la estación GPS en Manaus, Brasil, cerca del centro de la cuenca, no observó una variación de dos centímetros, sino de siete.

Reclutó a Douglas Alsdorf, geólogo de la OSU, para ayudarle a correlacionar su información con un modelo de flujo de agua en la cuenca. Usaron una aproximación muy simple, coloquialmente denominada «modelo bañera», que asume que el nivel de agua aumentó y disminuyó uniformemente a lo largo del Amazonas, como el agua de una tina o bañera.

Con colegas de Estados Unidos y Brasil, Bevis y Alsdorf combinaron los datos del GPS y el modelo de la cuenca para mostrar que entre 1995 y 2003, el lecho rocoso de la zona de Manaus subió y bajó con un patrón regular que coincidió con el de las crecidas anuales de la cuenca. El basamento de la región se hundió lentamente conforme el agua desbordada se acumulaba, y emergió a medida que el agua se fue retirando. El cambio promedio en altura fue de aproximadamente 7 centímetros.

Imagen: (Superposición de imágenes de la cuenca del Amazonas, una del período de aguas bajas a finales de 1995, y otra del pico de altura en 1996.) (Foto: OSU)
Fuente: Universidad Estatal de Ohio
Traducción: Noticias21