Girasoles contra el SIDA

Investigadores del centro de biotecnología molecular de Bonn (CEMBIO) han realizado un hallazgo en la síntesis de un nuevo grupo de fármacos que esperan revolucionará el tratamiento del virus del SIDA.

GirasolEl nuevo tema candente de la investigación sobre el SIDA se centra en el grupo de fármacos DCQA (ácido dicafeiolquínico). Desafortunadamente, el fármaco es extremadamente excepcional, y aparece en cantidades mínimas en alimentos como la alcachofa y la achicoria salvaje, alcanzando en el mercado el precio de 1.000.000 euros por gramo. A pesar de su precio, sin embargo, vale la pena buscarlo: en el laboratorio, el DCQA previene que se reproduzca el virus del SIDA.


Investigadores de la universidad de Bonn han descubierto una nueva forma posible de fabricar el DCQA a un coste mucho más reducido que el actual. Trabajando con girasoles, el equipo investigó cómo la planta se las arregla cuando sufre los ataques del hongo de podredumbre blanca del tallo. Descubrieron que las plantas que eran resistentes a estos ataques produjeron su propio DCQA.

«El ácido dicafeiolquínico (DCQA) puede impedir que el virus VIH se reproduzca, al menos en los cultivos de células», explica Claudio Cerboncini, quien trabaja ahora en el centro de investigación Caesar. «Es una de las pocas substancias que se conocen hoy en día que inhiben la integrasa viral, una enzima que es esencial si se reproduce el patógeno».

Estos «inhibidores de integrasa» se consideran un gran descubrimiento para la investigación y el tratamiento del SIDA, ya que los fármacos tienen pocos efectos secundarios en comparación con los actuales baturrillos farmacológicos, que salvan la vida, aunque la debilitan. Las pruebas clínicas iniciales parecen confirmar el potencial del DCQA.

«Queremos intentar cultivar células de girasol o de otras plantas en una solución de nutrientes junto con el moho de la sclerotinia sclerotiorum (podredumbre blanca del tallo) y obtener después del líquido la enzima», declara el investigador de CEMBIO, Ralf Theisen. «Si las cosas marchan como estaba previsto, podríamos reducir sustancialmente el coste de DCQA».

El Dr. Theisen está especializado en cómo genes específicos pueden activarse y desactivarse en pruebas de gravedad cero, pero esta investigación tiene aplicaciones en la síntesis del DCQA a un coste económico. Si la investigación avanza como estaba previsto, el gen DCQA de los girasoles se identificará, copiará e incluirá «en una bacteria, que puede producir la enzima en grandes cantidades. El paso fundamental de la síntesis sería entonces una cosa de niños y se podría llevar a cabo a nivel industrial utilizando la tecnología de la fermentación».

Fuente: Cordis