Un grupo de científicos ha encontrado en las cuevas de Stekfontein, en Sudáfrica, heces fosilizadas de hiena con cabellos que sólo pueden pertenecer a primates.
Hasta la fecha, el cabello humano más antiguo conservado era de una momia chilena de 9000 años de antiguedad, en cambio, estas heces fosilizadas datan de entre 195.000 y 257.000 años.
En esa época, estaríamos justo en el momento anterior al cual se cree que surgieron los humanos modernos, pero se solapa con la fase final de la existencia del Homo heidelbergensis, un antepasado de los Neanderthal y esto provoca que no estemos seguros a cual de las dos especies pertenecen los restos capilares.
En total, se hallaron 40 cabellos fosilizados (cuyo aspecto era similar a agujas de cristal) y que muy probablemente provengan de algún cadáver con el que se toparon las hienas.
Fuente: El blog de Maikelnai
Por sorprendente que nos pueda parecer, un equipo de investigadores lograron tomar fotografías láser en una milésima de una billonésima parte de un segundo para estudiar el papel de los electrones en la transferencia de energía.
Según publica la revista especializada Physical Review Letters, este equipo británico examinó la proteína LH2, muy conocida dentro del sistema fotosintético y que ayuda en el proceso de extracción del agua los electrones que luego conducen la reacción mediante la cual el dióxido de carbono se transforma en azúcar.
«En general, estamos tratando de comprender cómo puede la naturaleza transportar energía en grandes moléculas, y la fotosíntesis es un buen ejemplo de cómo la naturaleza lo hace con extraordinaria eficiencia», aseguró el director de la investigación, el doctor Mercer.
Esta investigación pretende, entre otras cosas, mejorar el rendimiento de los paneles solares, la mayoría de los cuales funciona a un 10% de su capacidad.
El método desarrollado por estos investigadores, permite observar el acoplamiento de los electrones con sólo un pulso láser «ultra-rápido» de 100 femtosegundos, 10.000 millones de veces más corto que el del flash de una cámara promedio.
«Esto significa que podemos tomar una foto de cualquier sistema antes de que los átomos tengan una posibilidad de moverse significativamente», concluyó Mercer.
Fuente: BBC Ciencia